La Enseñanza del Espíritu

    Así, una cosa produjo la otra, y pronto el significado original de la palabra "Dios" fue olvidado; por lo tanto, los supuestos dioses creadores pudieron emprender su marcha triunfante en el reino de las religiones, sectas y en la creencia de la gente.

  1. ¿Qué es la Creación? ¿Qué es lo que uno debe imaginarse con este término?

  2. La Creación es realmente todo el universo, la Conciencia Universal; la fuerza y la energía más grande que se puede imaginar el ser humano. Y la Creación también es, sin excepción, la totalidad de la energía y de la conciencia de todas las formas de vida que existen. En su forma primaria es la energía espiritual más pura, manifestándose externamente en innumerables y diversas formas de energía, incluso hasta la materia más grosa. Como Creación, esta energía universal de todos los niveles y áreas, incorpora tanto el SER espiritual como también la existencia material.

    La Creación, como universo, es la forma de energía más grande y la más alta conciencia activa imaginable que es capaz de evolucionar. Sus leyes y directivas tienen una validez ilimitada a escala universal, en todo nivel de existencia y en todo nivel espiritual - sin falla alguna.

    La Creación es la fuerza más poderosa y la energía más poderosa de esta existencia universal-creacional, sin comparación alguna con nada humano. Y sobre todo, no tiene la más infinitésima pizca en común con las maquinaciones humanas de un "Dios creador", el cual, comparado con la Creación y su poder, su saber y su energía, se desaparece completamente en un abismo sin fondo de lo ridículo.

  3. ¿Qué papel juega la Creación en nuestra vida y en todas las otras formas de vida?

  4. Para los seres humanos y todas las otras formas de vida, la Creación tiene un enorme significado, ya que cada forma de vida trae dentro de sí una minúscula parte de la Creación, que es lo que realmente vivifica la forma de vida. Sin esta minúscula partícula del espíritu de la Creación, ninguna forma de vida podría vivir, pues este espíritu de la Creación es la energía real y fundamental de la vida. Esta energía, a su vez, es dependiente de la energía total de la Creación misma, la cual emite una forma de energía muy fina, la llamada Energía Vital Cósmica, la cual es absorbida por todas las minúsculas partículas del espíritu del la Creación, vivificándolas de esa manera. Por esto, se podría considerar a esta Energía Vital Cósmica, como un "alimento creacional", por así decirlo, que vivifica a todas las partículas del espíritu de la Creación dentro de todas las formas de vida. De este modo, toda forma de vida depende de la Creación, aunque a pesar de esto, ella no da mandato alguno, como por ejemplo, de cómo un ser humano debe formar y desarrollar su vida.