Sobrepoblación 05
Guerra como Resultado de la Sobrepoblación
Guerra como Resultado de la Sobrepoblación y Respuestas a Bobas e Ininteligibles Acusaciones y Reacciones
Por Elisabeth Moosbrugger (Alemania) y Billy
Una de las reacciones más frecuentes y emocionales ante las medidas para la realización de la suspensión mundial de nacimientos que hemos propuesto es la pregunta: ¿quién financiará el enorme producto social para las generaciones que envejecen? ¿quién trabajará por las pensiones de los ancianos? ¿quién será responsable del cuidado de los padres cuando ellos envejezcan?
En Europa y en los países civilizados del oeste como en todos los otros países de la Tierra, ya es como un deber obligatorio ponerles la pensión a los descendientes en la cuna, quien dice una hipoteca involuntaria para una vida que es la mayoría de las veces indeseada. La gente, en su ininteligible y primitiva forma de pensar afectada de falta de inteligencia [por no estar dispuesta a reconocer el problema como tal, ni a ver las consecuencias que produce; nota del trad.], simplemente no puede ni quiere comprender que uno no puede erigir las pensiones sobre la espalda de las generaciones venideras. Esta clase de seguro para la vejez causa un constante e imparable aumento en el número de descendientes, cuyas pensiones, igualmente, mediante trabajo, esfuerzos, penurias y pagos deben ser proveídos y mantenidos por un número de descendientes aún mayor. Esto corresponde a un esquema que es como una "bola de nieve", un imparable y eterno círculo vicioso del que no hay escape porque la respectiva responsabilidad propia, la que por principio cada persona debe llevar, es simplemente transferida, por la forma de pensar errónea y miope, hacia la generación que viene. Así piensan tanto el pueblo como las autoridades y cada persona; simplemente y sin pensarlo, según el lema: Si tenemos más niños, entonces tendremos una vejez satisfecha y sin problemas.