Profecías y Predicciones

100. A pesar de que la naturaleza se defiende contra la locura humana de la destrucción planetaria, la Tierra se volverá cada vez más desnuda y estéril, y el aire arderá por culpa humana porque la capa de ozono se destruirá lentamente.
101. Debido al ser humano, las aguas de la Tierra se convertirán cada vez más y más en charcos pestilentes y toda vida marchitará lentamente, al mismo tiempo que se extraerá de la Tierra hasta el último de sus tesoros, por lo que todos los bienes se volverán escasos y crecerá de esa manera el odio entre los humanos, pues cada uno desea tener lo que tiene su prójimo.
102. La conciencia, la razón y el entendimiento del ser humano serán sus prisioneros y él estará ebrio de creencias sectarias y religiosas, por lo que no se dará cuenta que, mediante las religiones y las sectas, él es engañado y alejado más y más de la verdad efectiva de la Creación y sus leyes y mandamientos, y en consecuencia, correrá tras las imágenes y los espejismos irreales de las religiones y las sectas que le mantienen lejos de la verdad y lo convierten en una sierva oveja de lo malvado.
103. Las religiones y las sectas caen sobre los creyentes como malignos animales de presa; a todos los conducen y los arrojan en el más profundo abismo del extravío y de la ignorancia - y para cumplir totalmente con la intriga, instigan al uno contra el otro para poderlos apresar bajo sus garras y robarles la verdad de la vida.
104. Así como lo han hecho hasta el presente, las religiones y las sectas reinarán aún durante mucho tiempo mediante sus representantes y sus gurús para así dominar e imponerse sobre los inocentes e inactivos (“inactivos” en lo concerniente al conocimiento – Nota del traductor) seres humanos, pero en el futuro lejano perderán paulatinamente sus lugares de culto, en los cuales predican disparates y extravían y esclavizan a los seres humanos; pero ya les llegará su tiempo en el que deberán esconder sus caras y ocultar sus nombres para no caer víctimas de la ira del pueblo como consecuencia de haberlo extraviado.
105. Aún es así, que cada creyente es en realidad un siervo de las religiones y las sectas, a pesar de que cada uno crea equivocadamente ser un ser humano libre; sin embargo, esto cambiará, ya que llegará el tiempo en que nadie o casi nadie tomará parte de las reuniones de gurús, de “maestros sublimes”, de “iluminados”, de curas, papas, sacerdotes, etc., puesto que muchos del pueblo se levantarán y se opondrán a las religiones y las sectas para derrotar sus mentiras milenarias con la verdad.