Pensamientos y Sentimientos sobre el Tema de las Traducciones

En aquel tiempo ya vivía en un país de habla hispana; o sea que entre tanto tuve bastante tiempo para aprender este idioma de forma funcional y satisfactoria. Pronto, tras haber leído el primer texto, me enteré por otras personas de habla española que deseaban también tener acceso a estos textos, pero no entendían el alemán. Y así pensé que sería necesario empezar con la traducción al español de algunos textos. Al mismo tiempo sentí también que era una magnífica ventaja el poder entender alemán, puesto que esta situación me daba acceso directo a textos que nosotros podemos considerar como un verdadero tesoro, cuyo guardián es Billy; tal como su nombre indica: Eduard = “guardián del tesoro”. Esta es también una circunstancia para acordarse de que Billy, desde el principio, ha realizado una enorme cantidad de trabajo y aún la sigue realizando, poniendo por escrito sus mensajes y los de los pleyadianos y haciéndonoslos pasar a nosotros, a lo que le sacamos provecho evolutivo. Por ello, él merece de todos nosotros el agradecimiento, que es lo que aquí le deseo expresar de corazón. Un buen modo de agradecerlo es sin duda también ayudarlo en su trabajo, cada cual según sus posibilidades.

Elaborar traducciones significa intentar entender los textos antes de traducir. O sea que traducir es también un procedimiento de aprendizaje, y la experiencia del aprendizaje aporta también evolución, y la evolución una realización plena del sentido de la vida. Una parte adicional de esta realización radica en el hecho que a través de la existencia de las traducciones, las personas interesadas podrán vivir ese proceso de aprendizaje, o sea que nosotros, en ese momento estamos compartiendo conscientemente el camino. Esto significa que nosotros en ese momento sentimos y reconocemos la evidencia del hecho de que convivimos y coexistimos con todos y cada uno en el conjunto del universo; y esa sensación se designa como amor, como el principio más elevado de la vida.