Manifesto de la FIGU

La FIGU es guardiana de la verdad y su tarea es difundir las verdaderas enseñanzas espirituales, de amor, de sabiduría y lógica entre los seres humanos de una manera instructiva e informativa para que se tome el camino hacia una vida libre y pacífica y consciente de la Creación.

OM, CANON 35, Verso 111

Caminad en la luz de la verdad como niños de la luz, Pues LA RADIACION DE la luz es PURO amor, bondad, justicia y verdad en el conocimiento.

La utilización de fuerzas espirituales en neutralidad positiva

Las enseñanzas espirituales de la FIGU enseñan que la neutralidad positiva representa un valor positivo en toda forma; por eso se llama "neutral-positiva". Las fuerzas espirituales son absolutamente neutrales-positivas y son almacenadas como tales en el reino espiritual; éstas pueden ser utilizadas por la conciencia material.

El poder del espíritu es una fuerza puramente energética, la cual puede ser utilizada a través del estudio de las enseñanzas espirituales y de la meditación y su uso. Las fuerzas espirituales y de la conciencia de una persona crecen lenta pero continuamente. A través del entendimiento y la práctica, el hombre tendrá algún día la capacidad para aplicar conscientemente sus poderes espirituales. Es a través de la aplicación consciente de estas fuerzas puramente energética-creacionales que se nos da, a nosotros los seres humanos, la oportunidad de evolucionar conscientemente, esto es, desarrollarnos conscientemente.

La implementación de las enseñanzas espirituales es el acatamiento de las leyes y directivas de la Creación

Las enseñanzas espirituales de la FIGU instruyen el acatamiento de las leyes y directivas creacionales; éstas traen éxito en todo aspecto, tanto en lo espiritual como en la consciencia, en lo psíquico y también en el reino puramente material porque ayudan a la persona a reconocer el significado y el propósito de la vida, lo cual a su vez ayuda a hacer el camino de la vida más simple, más bello y más alegre. La aplicación de las enseñanzas espirituales ayudan en el vivir cotidiano; éstas nos vuelven primero personas realmente libres que generan interiormente el equilibrio y la paz, y esto finalmente trae la sabiduría, al amor y la paz para toda la humanidad de la Tierra.