Boletín Especial 10

Mis Gracias

Mi agradecimiento a todas aquellas personas buenas y discernidoras que se preocupan de entender y de apreciar mis palabras y mi enseñanza. Entre ellos hay muchos a quienes les debo agradecimiento por el hecho de que quienes investigan la verdad fundamental y efectiva que ha sido dada por las leyes de la Creación se disponen a vivir de acuerdo a ellas. El entendimiento rápido de muchos convierte mi enseñar en alegría, y los favorables criterios de todas aquellas personas que han encontrado a través de mis palabras una existencia que vale la pena vivir, elevan mi satisfacción. Todos ellos son inteligentes, justos y respetuosos jueces míos y de mis palabras, a las que les rinden atención, honor y dignidad.

Estoy consciente de los buenos y beneficiosos logros que todos ellos han sacado de mi enseñanza y de mis palabras, y que todos ellos transponen los valores ganados tanto para sí mismos como para el prójimo. Todo esto es para mí un incentivo y una estimulación de no ahorrar ningún esfuerzo, y de seguir preocupándome con mi trabajo en toda forma imaginable, positiva y con amor. Así pues, quiero seguir esforzándome constantemente por enseñar y de explicar y de colocar la piedra fundamental por medio de la cual más y más falibilidad sea eliminada del mundo y que en un lejano día, el bienestar del conocimiento, de la sabiduría y del amor entre en la conciencia del ser humano. Ojalá que mis enseñanzas y mis palabras contengan siempre toda la necesaria sabiduría y amor y todos los beneficios de la paz, la libertad y la armonía, de tal forma que traigan un mejoramiento de todos los valores, para que el ser humano alcance una perfección relativa en su vida y en todas sus obras.

Las personas observadoras reconocen el hecho que la enseñanza de la verdad, la cual es la enseñanza de las leyes de la Creación, genera grandes cambios, tanto en los pensamientos y sentimientos, en la ampliación del horizonte del conocimiento y de la sabiduría, como también en la forma global de conducir la vida. El aprendizaje y la aceptación de la verdad efectiva, tanto como la experiencia consciente y la experimentación de la enseñanza de la vida y sus resultados, conducen a un éxito muy valioso. Pero un resultado solo se materializa cuando éste es elaborado conscientemente, cuando las correcciones sugeridas son aceptadas y entendidas y de ello se extrae la necesaria comprensión.